Un post de lo más lechoso… ¡Gracias!

Quiero darles las gracias a tod@s por sus comentarios acerca de este blog, por su apoyo y sobre todo, por sus aportanciones a cada post. Cada letra, cada idea, cada emoción aquí expuesta me ayuda a vaciar toda mi leche fría… ja, ja, ja.
Yo me prometí divertirme más, ser menos «políticamente correcto» y ser más yo, más congruente con lo que siento hoy y lo estoy disfrutando al máximo. Ya he recibido comentarios encontrados de la gente que sigue  chavonuevatierra.com  y lo único que puedo decir es que todo cambia, que aunque somos los mismos, cuando nos movemos de lugar, todo se ve desde otra perspectiva. ¿Y para qué está la vida si no es para caminarla, para bebérnosla, para explorarnos, para romper nuestros propios límites y abrir la mente? Cuando llegamos al punto de empezar a ver «bien» cosas que antes veíamos «mal», cuando nos reconciliamos con muchas formas y aprendemos a respetarlas, incluso a disfrutarlas, creo que hemos crecido y ganado libertad. Lo he dicho en varias ocasiones: «no escribo intentando caerle bien a nadie, escribo como una necesidad de compartir lo que a mi me ha funcionado y en el caso de este blog, lo que Salvador, Chavo, el ser humano se atreve a sentir a cada momento». Es por esto que cada comentario de ustedes me llega tanto. Porque son parte de la cara que soy y no nadamás de la que la gente quiere ver. Pero si hay una cosa en común entre mis dos blogs y en todo lo que hago, mi mayor intención de hacerlo todo con respeto, amor y buena leche. Ja, ja.
Así que cada quien con su cada cual, cada uno con el idioma que mejor entienda y de la forma que más se identifique.
La Leche Fría es un elixir, un experimento que intenta integrar el alma y la nalga.
«Alma»  Esta palabra a todos les suena correcta, bien y bonita. Sin embargo, «Nalga» a muchos les incomoda e inapropiada y déjenme les digo que también es parte de todos nosotros. Obvio, unos las tienen mejor que otros… ja, ja, ja,  pero no veo por qué genera conflicto. Con el paso del tiempo he obtenido mi propia comprensión de lo que significa «vivir con los pies en la tierra y la mente en las estrellas». Sol y luna, día y noche, sexo y espíritu. «La vida es todo» y cada uno tenemos la libertad de vivirla de la manera que más nos plazca y de la forma que más feliz nos haga. Y esto, obviamente, va cambiando a cada momento…

Señoras y señores: «aquí jugamos a la vida y las sorpresas y los sobresaltos son bienvenidos».